Correr Definitivamente no es de Cobardes

Correr Definitivamente no es de Cobardes

06 abril 2009

IX Media Maratón de Madrid


Ayer domingo tuvo lugar por las calles de Madrid la siempre dura Media Maratón, que este año hacía la edición IX.

Todos los que habéis participado años anteriores ya sabéis de la dureza del recorrido y es que “Madrid es así” y por mucho que lo cambien (como ha sido el caso de este año), siempre resulta duro. Además creo que les encantan los finales demoledores.

El viernes a mediodía me acerqué a la Feria del Corredor, bueno, Feria por llamarlo de alguna manera. No sé qué es lo que pasa con estos eventos deportivos que se organizan en Madrid que tienen una ferias pobres, más bien mediocres. Llegas a la estación de metro de Nuevos Ministerios, te acercas a unos paneles para saber tu número de dorsal, vas al final de la feria a por el dorsal y vuelves al principio a por la camiseta y la bolsita de corredor. Tanto paseíto, supongo para forzarte a ver la Feria, que me reitero no merece ni denominarse “Feria”. La camiseta como la de todos los años, de ese tejido que se te engancha en la piel y viene cargado de electricidad estática. Para mi gusto, ni para trapo de cocina.

Recogida de dorsales en la Feria del corredor
A diferencia de otros años en los que para mi la Media Maratón de Madrid era mi carrera del año, mi principal objetivo, este año tenía un cúmulo de sensaciones de cara a la misma. Por una parte quería hacerla a tope, mejorar mi marca del año pasado (1h39min), por otro lado me convenía rodarla al ritmo del maratón (4.55-5.00min/km) y ver sensaciones. Si a esto le sumamos la molestia del pie … imaginaos con qué cuerpo me levanté el domingo.

El sábado bajamos al Retiro a rodar 5km y a probarme tras las infiltraciones subcutáneas de Traumeel que me habían hecho. Horror, deseperación… no tengo palabras para lo mal que lo pasé. De hecho, volví a casa a sabiendas de que lo mejor era no salir el domingo. Así que me tiré todo el sábado con baños de contraste, masaje con cubito de hielo directamente sobre el tobillo, masaje con cremita y bolsita de hielo.

El Domingo amanecí sin dolor y bastante animada a correr la Media. Tenía claro que a tope no podía ir, pero rodarla ….

A las 8.30 estábamos en el Retiro, respirando el ambiente precompetición, con un día claro y despejado, de los que me gustan a mi. Nos encontramos a Pepe. Marisa ya estaba rodando porque no participaba en la Media.
Poco a poco fue llegando gente, y ya nos preparamos para salir.
Yo, como siempre con mi Rolex al lado: Luis Hita. La verdad es que tiene mérito lo suyo. El domingo pasado llegó de Tokyo, donde participaron en el Maratón y a las 2 semanas se mete una Media. Me dijo que íbamos a rodarla tranquilos, así que, fue en ese momento cuando vi la luz… Perfecto!!
Unos "moritos" que se pusieron en el banco al lado del nuestro antes de la salida,creo que alguno de ellos ganó.

Gracia y Emilio y un compi del gym de Gracia, que este año tambien se estrenará en MAPOMA.
A las 9.30 dieron la salida y las 12.000 personas que nos habían encajonado en el Paseo de Coches del Retiro iniciamos la marcha como pudimos. No se podía correr de tanta gente que había, tampoco entiendo a los ansiosos que van atropellando literalmente a la gente, haciéndoles trastabillear para buscar su sitio. Hay que ir tranquilos, buscando huecos pero sin molestar a los demás.
Parecía que el tobillo no me dolía y poco a poco nos fuimos acomodando al ritmo de 4.50-4.55. Pero desde el km 4 al 7 (subida por Santa Engracia, Cuatro Caminos y Bravo Murillo) fue un continuo sufrimiento, fue ahí donde acusé todos los km acumulados en mis piernas, notaba un cansancio enorme y una pesadez de piernas que hacía que dar un paso supusiera un tremendo esfuerzo. Se lo dije a Luis, así que me bajó el ritmo. En el km. 7 parecía que me recuperaba, pasamos Plaza de Castilla, bajamos Mateo Inurria (donde sentí los codazos de una rubia, que debía haberse enamorado de Luis porque no me dejaba seguir a su lado) y bajando por Pío XII fue cuando Luis me advirtió que se notaba pinchazos en una pierna. Además uno de esos locos ansiosos me enganchó la pierna por detrás y para evitar caerme y dejar los dientes en el suelo, imaginad con qué pie impacté en el suelo con fuerza … está claro, con el dolorido (Murphy también practica deporte).
Luis pareció recuperarse, pero bajando de nuevo, le dió otro pinchazo y decidió pararse. “Sigue Rosa, sigue Rosa”.
Vaya planazo!!! Fran se había adelantado en la subida de Santa Engracia, mi padre iba más atrás, como podía acompañado de un tremendo catarro que arrastra desde hace casi tres semanas y del bueno de nuestro amigo Diego, y mi acompañante de lujo, mi referencia: Luis, me tiene que dejar. Hubo un momento que me sentí como huérfana y me pregunté qué carajos hacía allí, con el pie ahora algo más dolorido que al principio, con una pesadez en mis piernas como si hubiera engordado 10 kilos y más sola que la una a 10km del final. Así que, bajé ritmo y decidí terminar como fuera. Hacía sol, que me carga las pilas y parecía que me iba recuperando del cansancio.
Bajando por Serrano me pillaron Diego y mi padre y corrí con ellos unos kilometrillos. Les dejé bajando Principe de Vergara tras encarar la subidita del km.14 en Diego de León. A partir de aquí fueron mis mejores Km, manteniéndome a 4.52 y sin notar ya la pesadez de las piernas.
Pasamos por Menendez Pelayo, por la puerta del Retiro donde me animaron algunos compis de entrenamiento y encaré Reina Cristina concentrada en la subidita que se avecinaba: Cuesta de Moyano. Podía decir miles de cosas, pocas bonitas, sobre la genial idea de entrar al retiro por aquí, tras 19km de carrera, pero… sobran las palabras cuando la mayor parte de la gente la subía andando.
Y cuando por fin llegas arriba, el recorrido discurre por una ridícula “S” que lejos de ayudar a recuperarte te deja los tobillos un poco más maltrechos. Bajamos y subimos por el paseo de los melancólicos y enfilas el Paseo de Coches para llegar a meta.
Al final, 1h46min. Mal para lo que me hubiera gustado pero bien en base a las molestias que tuve y todas las encrucijadas de la carrera.
En general, recorrido duro y poca animación. Los madrileños, que no corren, no salen a animarnos. Es una de las cosas que más ganas tengo de experimentar en Londres, ya que me han dicho que la carrera es un continuo hervidero de gente animando.
Fran terminó en 1h43min, yo pensaba que terminaría en 1h35-1h37 porque está muy bien, pero también sufrió lo suyo al final y el calor lo acusó más. Ya le he advertido que no se acostumbre a ganarme. En cuanto me recupere se va a enterar …
Hoy Lunes pensaba salir a rodar 10km, pero como tenía el pie cargado de la carrera (mucho asfalto), he preferido darme un descanso y ya veremos si hasta el miércoles no me calzo de nuevo las zapatillas. A 3 semanas de Londres no quiero arriesgarme a que por no descansar un par de días, no poder correr el Maratón, no??
-Seguro que más de uno de los que me conocéis o me leáis, estáis pensando que por fin he entrado en razón.-

3 comentarios:

Quique dijo...

Hola Rosa, lo primero gracias por tus ánimos.

Buena fiesta se organizó ayer, lo de menos es el tiempo marcado, has hecho bien en no salir hoy...

Ya queda menos para el gran día, seguro que salimos airosos.

Lo mio es una sobrecarga en el soleo, una semana de reposo y creo que estaré bien.


Un saludo
Quique

Anónimo dijo...

....bien, el único que enfoca las carreras como a mí me gustan, lo importante es salir y llegar, siempre que el cuerpo te lo respete, ánimo Quique, que eso no es nada en una semana pulverizas tiempos.
firmado: el que tendría que haber hecho 1:37.

Jorge dijo...

Rosa,

Las grandes citas suelen venir precedidas de malos augurios. Seguro que Londres será un exitazo.

Ademas, de aqui a la cita casi no entrenamos (o eso quiero pensar jejeje).

Animo y a por todas